La obligación de auditar las cuentas anuales es un tema fundamental en el ámbito contable y legal. Sin embargo, existen ciertas excepciones y claves para entender esta obligación, y es importante conocerlas. En este artículo encontrarás información detallada sobre la obligación de auditar las cuentas anuales, así como las claves y excepciones que debes tener en cuenta.

¿Qué es la obligación de auditar cuentas anuales?

La obligación de auditar las cuentas anuales es una medida establecida por ley para garantizar la fiabilidad y autenticidad de la información económica y financiera de una empresa. Se trata de un proceso de verificación de las cuentas anuales de una organización para determinar si expresan una imagen fiel del patrimonio, situación financiera y resultados de la organización, de acuerdo con el marco normativo de información financiera que resulte de aplicación.

¿En qué casos es obligatorio realizar una auditoría?

Una empresa estará obligada a auditar sus cuentas anuales si cumple dos de los siguientes tres requisitos durante dos ejercicios continuos: si su importe neto de la cifra de negocio supera los 5.700.000 euros, si el total de sus activos supera los 2.850.000 euros o si el número medio de trabajadores es superior a 50. Además, existen otras situaciones en las que una organización debe someterse a una auditoría de cuentas, como aquellas que emiten valores admitidos a negociación en mercados secundarios oficiales de valores o sistemas multilaterales de negociación, las que emiten obligaciones en oferta pública, aquellas que se dediquen de forma habitual a la intermediación financiera y entidades que hayan recibido subvenciones o ayudas por un importe total acumulado superior a 600.000 euros.

Obligación de auditar cuentas anuales: claves y excepciones

¿Cuál es la finalidad de la auditoría de cuentas anuales?

La finalidad de la auditoría de cuentas anuales es verificar si las cuentas expresan de manera fiel el patrimonio, situación financiera y resultado de la empresa, según el marco normativo de información financiera que corresponda. Además, la auditoría también tiene como objetivo garantizar la autenticidad de las cuentas anuales de la empresa y dotar de calidad y fiabilidad la información económica y financiera de la misma frente a terceros que requieran de dicha información. En resumen, es importante para las empresas conocer la obligación de auditar sus cuentas anuales y los casos en que ésta es necesaria. Además, la auditoría de cuentas anuales no solo es una medida de cumplimiento legal, sino que también sirve para garantizar la transparencia y la fiabilidad de la información económica y financiera de la empresa.

Claves para cumplir con la obligación de auditar cuentas anuales

Requisitos legales y normativos

La legislación española establece la obligatoriedad de auditar las cuentas anuales de una empresa en determinados casos. Si durante dos ejercicios continuados, la empresa cumple con dos de los siguientes tres requisitos: que el importe neto de la cifra de negocio supere los 5.700.000€, que el total de sus activos supere los 2.850.000€ o que el número medio de trabajadores durante el ejercicio sea superior a 50, está obligada a afrontar una auditoría externa.

Además de estos requisitos generales, existen otras situaciones que exigen una auditoría de cuentas anuales. Por ejemplo, las empresas que proyectan valores admitidos a negociación en mercados secundarios oficiales de valores o sistemas multilaterales de negociación, las que emiten obligaciones en oferta pública, aquellas que se dedican de forma habitual a la intermediación financiera y todas aquellas que sean rectoras de los mercados secundarios oficiales, las compañías rectoras de los sistemas multilaterales de negociación, la Sociedad de Sistemas, las entidades de contrapartida central y la Sociedad de Bolsas, deben someterse a una auditoría.

Procedimiento de auditoría

Para llevar a cabo una auditoría de cuentas anuales es importante conocer el procedimiento estándar. La auditoría implica la realización de pruebas sustantivas y de control para asegurarse de que la información financiera presentada en las cuentas anuales es precisa y fiable. Durante el proceso, el auditor evalúa el marco normativo utilizado para preparar las cuentas anuales y realiza una serie de intervenciones y comprobaciones para verificar su imagen fiel.

Primero, se lleva a cabo una planificación y diseño de la auditoría para conocer los detalles de la compañía y adaptar el procedimiento a sus necesidades. Luego, se realiza una revisión de los controles internos y se recopila la documentación necesaria de la empresa para revisar todo lo relacionado con las cuentas anuales. A continuación, se crean informes de hallazgos e informes finales, y se revisan los resultados con la empresa. Por último, se presenta un informe sobre la revisión de las cuentas anuales.

Documentación necesaria

Para realizar una auditoría de cuentas anuales, es necesario contar con una serie de documentos y registros. La empresa debe proporcionar al auditor toda la información necesaria con respecto a sus cuentas anuales, así como cualquier documentación relevante a su actividad empresarial.

El auditor verifica que la información presentada sea precisa y se ajuste a las normativas aplicables. Se revisan los registros contables, las transacciones financieras, los libros y las cuentas financieras y, si es necesario, se realizan pruebas adicionales para obtener más información.

En resumen, para cumplir con la obligación de auditar las cuentas anuales, es importante conocer los requisitos legales y normativos existentes en España, así como el procedimiento de auditoría y los documentos necesarios. La auditoría garantiza la autenticidad de la información económica y financiera de la empresa ante terceros y asegura que sus cuentas anuales reflejen fielmente su patrimonio, situación financiera y resultados.

Excepciones a la obligación de auditar cuentas anuales

Pequeñas y medianas empresas

Las pequeñas y medianas empresas (PYMEs) son una excepción a la obligación de auditar las cuentas anuales si cumplen ciertos requisitos. Para las PYMEs, la adaptación al marco normativo de información financiera suele ser menos onerosa, y esto puede traducirse en una reducción de los costos de auditoría, lo que se traduce en una ventaja financiera para estas empresas.

Si la empresa cumple simultáneamente con dos de los siguientes requisitos durante dos ejercicios consecutivos, no estará obligada a realizar auditoría de cuentas anuales:

Aunque las PYMEs están exentas de la obligación de realizar la auditoría de cuentas anuales, debemos tener en cuenta que siempre es recomendable tener unas cuentas anuales auditadas ya que esto dará una mayor confianza y credibilidad a los inversores, entidades financieras y otros terceros interesados.

Asociaciones y fundaciones

Las asociaciones y fundaciones también cuentan con una excepción a la obligación de auditación de cuentas anuales.

En general, la auditoría de cuentas anuales de las fundaciones solo será obligatoria cuando se cumplan simultáneamente dos de los siguientes requisitos:

Obligación de auditar cuentas anuales: claves y excepciones

Otras excepciones

Además de las anteriores, existen algunas otras excepciones a la obligación de auditar las cuentas anuales. En particular, no se requerirá la auditoría de cuentas anuales para empresas que:

No obstante, siempre es importante tener en cuenta que no realizar una auditoría puede tener una serie de implicaciones, como puede ser la pérdida de credibilidad y transparencia ante terceros interesados. En cualquier caso, es necesario evaluar cada situación concreta para determinar si procede o no realizar una auditoría de cuentas anuales.

Preguntas frecuentes

¿Qué pasa si no auditar las cuentas?

Si no se realizan auditorías en una empresa, las consecuencias pueden ser graves y afectar a diversos ámbitos de la organización, como:

Financiero: sin una auditoría, la empresa puede tener dificultades para obtener financiación, ya que los bancos y otras entidades financieras suelen exigir informes y estados financieros auditados para conceder préstamos o líneas de crédito. Además, la falta de auditoría puede derivar en errores y fraudes contables, lo que puede tener consecuencias legales y fiscales.

Operativo: la audición contable puede identificar áreas en las que la empresa no está funcionando adecuadamente y proporcionar recomendaciones para mejorar la eficiencia y la eficacia de los procesos. Si no se realiza una auditoría, la empresa puede estar perdiendo oportunidades para mejorar su rendimiento y reducir costos.

Legal: la empresa puede enfrentar problemas legales si no cumple con las regulaciones contables y fiscales. Una auditoría no solo asegura el cumplimiento normativo, sino que también ayuda a evitar cualquier posible error y fraude.

Imagen: una empresa que no realiza auditorías puede proyectar una imagen de falta de transparencia y confiabilidad. Los inversores y los clientes pueden considerar que la empresa no es ética y no cumple con las normas internas y externas.

En Kilium Asesores sabemos que la obligación de auditar cuentas anuales puede parecer complicada para algunas empresas y organizaciones, pero es una tarea fundamental para garantizar la transparencia y el cumplimiento de la normativa vigente. En nuestro blog hemos tratado las claves para cumplir con esta obligación, desde los requisitos legales y normativos hasta el procedimiento de auditoría y la documentación necesaria. También hemos analizado las excepciones a esta obligación, como las pequeñas y medianas empresas, asociaciones y fundaciones, y otras excepciones. Si necesitas más información, te invitamos a leer nuestros artículos en Kilium Asesores sobre auditoría y cumplimiento financiero.

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